Generalmente conozco el momento en el que nace una de mis conferencias, pero nunca tengo idea cuándo llegará a su fin.
Hay algunas, como Protoperformanceras, de las que conservo el PowerPoint y el guion, pero que se quedaron guardadas para siempre en el archivo. Fueron flor de un día.
Hay otras conferencias que siguen intactas, como Mujeres artistas del pasado o Traducciones: un diálogo internacional de mujeres artistas y, aunque ya no las presento como fueron originalmente, han reencarnado en otras obras o han sido parte de reconstrucciones de piezas en contextos museísticos, como puede verse aquí.
También hay conferencias que se han ido desmoronando hasta desintegrarse para ser parte de otras sin que yo me diera cuenta de que esto sucedía, como es el caso de la conferencia Arte feminista: lo personal y lo político, que fue parte de mi tesis de maestría, por lo que puede recuperarse, pero sus diapositivas han aparecido en un sinfín de conferencias que he dado sobre mujeres artistas o sobre mi proceso personal. Incluso están en piezas recientes, como es el caso de mi conferencia De cómo fui encontrando mi propia voz. Algunas de las primeras conferencias, del cual hablo aquí:
Detalle del primer Tendedero en el Museo de Arte Moderno en 1978.
Luego hay conferencias como la de El Tendedero, que crece y se transforma con cada nueva iteración de la pieza o varía de acuerdo al público al que me voy a dirigir. Yo creo que esa conferencia la he dado al menos 200 veces. En ocasiones, por cuestiones de tiempo, quito algunas imágenes para integrar otras. Creo que en algún momento haré una plática, dure lo que dure, recordando todos los Tendederos que haya hecho hasta entonces y después liberaré a la pieza y la daré por terminada. También dejaré de acompañar el proceso de nuevos Tendederos.
En contadas ocasiones, como en Archiva: obras maestras del arte feminista en México, he decidido cerrar el proceso. Archiva empezó como un proyecto para visibilizar el trabajo de las artistas a través de la creación de un expediente y una conferencia que difundí en encuentros feministas, museos y universidades. Con el tiempo mutó a instalación o exposición en centros culturales y museos. Archiva fue parte de mi proyecto Visita al Archivo de Ana Victoria Jiménez que pueden consultar aquí. La pieza siguió activa entre 2013 y 2021. Durante esos esos años, ARCHIVA rebasó sus máximas expectativas: di la conferencia una treintena de ocasiones por todo el país, sus materiales se presentaron en varias exposiciones, su versión para internet fue consultada por más de 10,000 personas, al proyecto y a 45 de las 71 artistas en ARCHIVA les abrieron página en Wikipedia y, en 2021 y me invitaron a la Cátedra Alfonso Reyes del Tec de Monterrey, en la que también participaban Dona Haraway y Judith Butler, entre otras importantes teóricas, por lo que sentí que el proyecto había llegado su mayoría de edad. De ser una pieza alternativa había entrado al mainstream. Al final de esa presentación, di el proyecto por concluido formalmente.
Mónica Mayer. Marzo 2024
