Autorretrato con sombrero de paja, Elizabeth Vigeé-Lebrun, 1782, diapositiva para conferencia sobre mujeres artistas de la Edad Media al Siglo XIX que conseguí en The Woman’s Building a finales de los setenta, seguramente gracias a la historiadora Ruth Iskin, quien daba clases ahí.

Hacer un proyecto a partir del trabajo en un archivo personal que no está clasificado, como es el caso de Hablando se entiende la Gente: Interviniendo el archivo de Pinto mi Raya a partir del texto, la imagen y la palabra, significa una operación en dos pasos:

• Primero hay que meterse a trabajar en el archivo para buscar lo que se necesita para la obra, lo cual implica seleccionar, restaurar, catalogar y pasar los materiales a formatos utilizables, ya sea fotocopiados o digitalizados.
• Y, a la par de estos trabajos y la producción de las obras, hay que ir conformando un nuevo archivo.

Y esto a veces se siente como tratar de chiflar y comer pinole al mismo tiempo.

Autorretrato, Romaine Brooks, 1923, también de la conferencia antes mencionada.

Así mismo, para mí es importante que se entable un diálogo entre el archivo y la obra nueva. En este sentido, a veces el archivo traza el rumbo de las obras, pero en ocasiones es a la inversa y los trabajos en el archivo se van definiendo a partir de obras específicas. Hay una interacción constante que tiene que ser flexible. Este año hemos trabajado así, de ida y vuelta. Les comparto parte de este proceso.

Imagen de la exposición Bedtime Stories, 1979, presentada en The Woman’s Building en Los Ángeles, California, en 1979.

Dado que el objetivo de Hablando es reconstruir algunas de las primeras conferencias que di en los años setenta y ochenta para contrastar la frágil oralidad de las presentaciones en vivo, con la rigidez de los documentos del archivo, los primeros meses del proyecto sirvieron para sentar sus cimientos y se hizo una primera revisión de cerca de 3000 diapositivas en el archivo. A partir de esto seleccionamos las diapositivas de los años setenta y ochenta que se digitalizaron y catalogaron junto con los guiones de las conferencias encontrados.

Daniel Manrique, de Tepito Arte Acá, pintando un mural. Él mismo nos dio esta diapositiva en 1980 para una gira de conferencias que dimos en Europa durante varios meses en 1981, entre las que hablábamos de la Generación de los Grupos.

Estas fueron los temas definidos y la cantidad de diapositivas digitalizadas:

Mujeres Artistas del siglo XVI al XX (98 diapositivas), Proyecto Traducciones (167 diapositivas), Feminist Art: the Personal and the Political (81 diapositivas y documento de 287 páginas), Arte Feminista (61 diapositivas), Los Grupos (170 diapositivas) y Artistas Varios (174 diapositivas).

TOTAL: 751 diapositivas y 287 páginas.

Uno de los proyectos que salió de los intentos de reconstruir las conferencias fue mi video Mujeres artistas o se solicita esposa. Recuento de una Gira, que pueden ver enterito AQUÍ o pueden consultar la entrada sobre la pieza en este blog AQUÍ.

Imagen del PPT que utilicé en la conferencia en Ex Teresa que muestra las portadas de los dos tomos de mis textos que les doné.

Por otro lado, como mencioné, a veces las obras definen el trabajo en el archivo. Eso sucedió con Mi larga, muy larga relación con X’TeReSa. Esta obra tiene dos componentes: una conferencia performanceada sobre 3 presentaciones que tuve en Ex Teresa a lo largo de los años, que se llevó a cabo el 6 de octubre en dicho recinto. Pero además de esta presentación en vivo, me plantee intervenir su Centro de Documentación donándoles una copia de todos los textos que yo he escrito a lo largo de las décadas en los que me refiero a Ex Teresa o la menciono. Esto implicó revisar todo lo que publiqué en El Universal, en revistas nacionales e internacionales, mis blogs y finalmente mis libros.  

A partir de estos materiales realicé un archivo de artista en el que, en dos tomos, reuní 475 páginas con mis textos y les regalé copias de los libros de mi autoría en los que los menciono. Entre ellos están 112 textos publicados en el periódico, 16 textos publicados n revistas, 28 textos publicados en blogs y 5 libros. Como se imaginarán, todo esto implicó un profundo trabajo de revisión de los materiales en nuestro archivo.

Hace poco más de 10 años, cuando hice la curaduría para la exposición Visita al archivo de Olivier Debroise: entre la ficción y el documento que se presentó en el MUAC en agosto de 2011, entendí que meterse a un archivo es una manera de buscarse a una misma. Hoy que llevo 13 años trabajando en archivos y que ahora regreso al mío me pregunto ¿Estaré tratando de trazar mi recorrido o de recuperar lo que se quedó en el camino? Aún no lo sé.

Mónica Mayer, octubre 2023